Santaneño viajó a Polonia para ayudar a ucranianos

Por casi un mes, Bruce Callow viajó a Europa para poder llevar esperanza y solidaridad.

Bruce Callow es educador en temas espaciales, escritor y asesor independiente de origen canadiense radicado en Costa Rica desde 1992. Él vive junto a su esposa Ana Luisa Monge en Santa Ana.

Callow al igual que el resto de la humanidad se conmovió mucho con la situación que se vive en Ucrania y decidió buscar la manera de ayudar.

Fue así como logró encontrar ayuda por medio de sus conocidos y emprender el viaje.

“El profesor de física del Colegio Mundo Unido en Santa Ana, Mateusz Jurecki, es polaco y me conectó con una amiga que vive en Varsovia, Mirela Moszczynska, quien me ayudó a desarrollar mi programa y también organizó mi alojamiento. Este fue un gran apoyo”, indicó Bruce Callow.

Este tico de corazón y santaneño por convicción, se puso en contacto con una serie de organizaciones antes de ir a Polonia y de esta forma pudo hacer muchos más contactos desde que llegó a su destino, quienes han podido aportar enormemente al programa desarrollado por Callow.

“Realmente no me recibieron formalmente, solo viajé aquí y comencé a hacer actividades voluntarias a la mañana siguiente de llegar. Las necesidades son grandes, así que simplemente salté y comencé a contribuir de manera constructiva”, comentó Bruce Callow.

Trabajando para llevar esperanza

Varsovia y Polonia han permitido que los refugiados ucranianos encuentren en ellos un albergue seguro, movilizándose de distintas formas para poder ayudar a miles de familias en extrema necesidad. Callow destaca que se percibe el deseo de ayudar en todo el país y en todas las intituciones del mismo.

“¡Es extremadamente impresionante lo que han hecho los polacos para acomodar a todas estas personas! Los voluntarios que ayudan a los refugiados han estado trabajando durante tantas semanas seguidas sin descanso, así que yo estaba feliz de poder ofrecerles algún tipo de alivio del estrés y diversión con mis presentaciones musicales”, afirmó Callow.

Dentro de las personas que ofreció su ayuda a Callow está Sandra Cauffman, la conocida ingeniera costarricense que trabaja en la NASA, ella le consiguió artículos promocionales de la agencia espacial para ser distribuidos entre las personas y servir de material didáctico por medio de la enseñanza que imparte Callow.

Bruce destaca que su misión fue ofrecer apoyo de diferentes maneras, principalmente para ayudar a levantar la moral y brindar momentos divertidos de distracción a las personas que atraviesan una situación de transición traumática.

Por medio de eventos musicales que incluyen sesiones improvisadas con ucranianos, ayudar en los centros de refugiados, dar clases espaciales en ellos y también en escuelas privadas que han creado programas de extensión los fines de semana para niños ucranianos; así como distribuyendo recuerdos de la NASA donde quiera que vaya, Callow ha podido llevar sonrisas y alegría en medio de una guerra.

Cadena de ayuda

Este canadiense también ha comprando y entregando artículos de primera necesidad a los centros de tránsito de refugiados en las estaciones de tren. “Recogí algunas donaciones financieras antes de venir aquí y afortunadamente un amable vecino mío se ofreció a duplicar esta cantidad, lo que ha ampliado nuestras compras”, indicó.

En su estancia en Polonia, ha podido ayudar a varios ucranianos a conectarse y encontrar ayuda y colaboración con familias canadienses para solicitar sus visas y poder mudarse a Canadá. El país norteamericano tiene una herencia muy fuerte con Ucrania y el gobierno canadiense está ofreciendo este tipo de apoyo.

Evgeniya Zakharova es una ucraniana que Bruce Callow conoció en la Estación Central del Tren en Polonia, y a quien pudo ayudar por medio de otra familia canadiense a iniciar el proceso para conseguir su visa canadiense y mudarse a ese país con su pequeña.

“Mi parte favorita es tener conversaciones con ucranianos y verlos reír y sonreír, así como pasar tiempo con voluntarios de Polonia y otros países que están aquí ayudando. Me alegra el día ver a los niños sonriendo y divirtiéndose en medio de todo esto. También estoy aprendiendo algunas palabras en ucraniano, afortunadamente muchos de los planetas del sistema solar tienen nombres similares al inglés”, comentó emocionado.

Bruce Callow no tiene planeado de momento regresar a Polonia, pero se muestra satisfecho de haberse animado y de haber encontrado el apoyo y la solidaridad de muchas personas, y haber ayudado de esta forma a una población que se ha visto obligada a dejar su país ante este conflicto.

“Ahora que tengo una red establecida de contactos aquí y he visitado las diferentes instalaciones para refugiados, podré continuar mi trabajo de forma remota. He tratado de hacer un diagnóstico de cómo se está manejando la situación de los refugiados aquí, para poder insertarme en áreas donde puedo ser de más ayuda”, agregó.

Callow hace un llamado a la población de Santa Ana para que puedan hacer todo lo que esté a su alcance para apoyar a los refugiados.

“Me gustaría llamar a la gente de Santa Ana a hacer todo lo posible para apoyar a Ucrania. Para más información sobre cómo hacerlo le recomiendo comunicarse con la Asociación Ucraniana de Costa Rica a este número de WhatsApp 8980 9611”, finalizó.